Este proyecto está orientado a la identificación de aquellas áreas con mayor riesgo a sufrir inundaciones mediante el empleo de imágenes de satélite. Y es así como derivado del mismo se expone a continuación una práctica recomendada que tiene por objetivo generar información sobre la dinámica de expansión y contracción de cuerpos de agua, a través de un análisis multitemporal de índices espectrales, generados a partir de imágenes RapidEye y SPOT 5, seleccionadas de acuerdo a las fechas oficiales de ocurrencia de eventos climatológicos “Niño” y “Niña”.
Este proyecto ha sido empleado en la Región del Caribe de Colombia. Esta zona figura entre las más expuestas a los fenómenos climáticos por la forma en que se utiliza su suelo. Así lo reveló un estudio realizado por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi, IGAC. Sus tierras ahora se pueden catalogar como deterioradas o en proceso de erosión, debido en gran medida al uso indiscriminado del recurso. Por ello estos suelos ya no pueden retener el agua suficiente para enfrentar un fuerte verano, lo que representa que los ríos bajen su caudal y se vea afectada de manera directa la biodiversidad colombiana. En el invierno, los terrenos no regulan la gran cantidad de recurso hídrico que reciben, razón por la cual se dan las inundaciones, en algunos casos inmanejables.
El cálculo de las superficies de expansión y contracción de cuerpos de agua a partir del procesamiento de imágenes de satélite multiespectrales RapidEye y Spot 5 de alta resolución, y la combinación de técnicas de análisis espacial, permiten la generación de cartografía a escala municipal (1:25.000), que puede ser integrada en los análisis y zonificación de las amenazas por inundaciones y condiciones secas que suelen ser frecuentes durante la ocurrencia de eventos niña y niño.
Los resultados de este trabajo pueden ser empleados como una base técnica para eventuales manejos del riesgo agroclimático, puesto que permiten identificar aquellas zonas con mayor riesgo a sufrir inundaciones tanto a nivel municipal como regional, dependiendo de la escala de trabajo seleccionada. De esta manera, se complementa una adecuada preparación de los planes de contingencia mediante la generación de alertas que informen del posible impacto al sistema productivo establecido en la zona.